Por Robert Bridge*
El extraño comportamiento del anciano presidente estadounidense el Día D rápidamente dio lugar a especulaciones, algunas crudas, otras brutalmente honestas.
Según todas las apariencias, parecía que la Madre Naturaleza vino a buscar al líder estadounidense precisamente en el peor momento. Durante una ceremonia conmemorativa del 80 aniversario del Día D en Francia, Joe Biden, de 81 años, de repente parecía muy decidido a tomar asiento, y ni siquiera su cariñosa esposa, la Dra. Jill, iba a detener la sentadilla. En busca desesperada de una silla, un trono o –como algunos han especulado crudamente– un orinal portátil, Biden ha vuelto a convertir a Estados Unidos en el hazmerreír del mundo entero.
Como en cámara lenta, Biden comenzó su descenso constante, luciendo como si estuviera atrapado en algún lugar entre uno de esos infames «¿dónde estoy?» pedos cerebrales y una defecación en toda regla. No debería sorprender que el mundo MAGA, furioso ante la perspectiva de que su hombre Donald Trump enfrentara 136 años de prisión, se conformara alegremente con la opción menos atractiva.
Breaking911, una cuenta de derecha de X (anteriormente Twitter) que cuenta con alrededor de 1 millón de seguidores, preguntó descaradamente «¿Biden se cagó en los pantalones OTRA VEZ?». Esa fue una referencia a una afirmación de 2021 de que el Vaticano se vio obligado a cancelar una transmisión en vivo de la reunión de Biden con el Papa Francisco porque el presidente tuvo un “accidente en el baño”.
Los expertos republicanos también alegaron que Biden estaba buscando una “silla invisible” mientras su esposa/administradora le esposaba la boca mientras ladraba órdenes en voz baja. Sin embargo, una usuaria de X llamada Stephanie no aceptó nada de eso, ya que acusó a la derecha de recortar el video justo antes de que Biden finalmente tome asiento junto a su esposa y el presidente francés Emmanuel Macron.
«¡¿Que diablos esta mal contigo?! Ya sabes quién eres… todos los que publican un clip cortado de este momento con la palabra ‘caca’ y ‘silla imaginaria’ muestran un total abandono de la verdad y de los problemas reales que molestan a la gente acerca de la administración Biden. ¡Esta SILLA REAL NO es un problema! (Tampoco lo es su lucha momentánea para sentarse, que viene con la edad). Sujétate malditamente”.
En la tarde del 6 de junio, las palabras «hacer caca» y «silla invisible» eran tendencia en X.
Además del fiasco de la silla invisible, Joe y Jill supuestamente se excusaron temprano del evento, dejando a Macron solo para felicitar a los veteranos del Día D.
“¡Ay!” escribió Charlie Kirk, fundador de Turning Point USA, un grupo conservador. “En un evento en Omaha Beach en honor al 80 aniversario de la invasión del Día D, la Dra. Jill Biden rápidamente escolta a Joe Biden, dejando a un presidente francés aparentemente perplejo, Emmanuel Macron, para honrar solo a los veteranos de la Segunda Guerra Mundial”.
Pero incluso si un espectador no está convencido de que Joe Biden se ensució los pantalones, abandonó el evento antes de tiempo o estaba buscando desesperadamente una silla que no estaba allí, es imposible ver el vídeo sin llegar a la conclusión de que el líder estadounidense no tiene el control total de sus facultades mentales.
No hace falta decir que este no es el tipo de liderazgo estadounidense que el mundo necesita mientras se encuentra al borde mismo de la Tercera Guerra Mundial. A pesar de la cuestión de la destrucción global, ésta no es menos inquietante: ¿Qué pasaría si Joe Biden realmente venciera a Donald Trump en la carrera por la Casa Blanca en cinco cortos meses? Es difícil imaginar al tambaleante demócrata terminando su próxima cena, sin mencionar otros cuatro años en el cargo. Igualmente inverosímil es que su vicepresidenta, Kamala Harris, esté desempeñando su deber de presidente mucho mejor y con casi la mitad de la edad de Biden. Es imposible decir cómo o cuándo, pero parece cada vez más probable que, tarde o temprano, algo vaya a suceder para Estados Unidos y el mundo si Biden permanece en el cargo por otro mandato.
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*Robert Bridge es un escritor y periodista estadounidense. Es autor de ‘Midnight in the American Empire’, Cómo las corporaciones y sus servidores políticos están destruyendo el sueño americano.
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Redacción Bogotá 